Cierra tus ciclos del día!

Dejar ir lo que hemos vivido en nuestro día y darle cierre a lo sucedido es importante para el bienestar de tu mente y cuerpo.

Para esto haremos un ejercicio bastante sencillo al acostarnos que no solo apoya a liberar tensiones mentales y emocionales del día, sino también apoya a desarrollar nuestra memoria y hacer conexiones de situaciones y procesos internos.

Simplemente recapitula tu día, ¿Qué situaciones viviste y cómo te movieron? ¿Con quién te encontraste y como fueron estos encuentros? ¿Qué lograste hacer, crear, transmitir? No debe tomarte más de 5 minutos. No se trata de analizar, simplemente observar lo transcurrido desde que despertaste hasta este momento en cama.

¿Listo? Ahora agradece por todo lo vivido y logrado, y deja ir aquello que no te agradó y toma el aprendizaje recibido. Es como cerrar los archivos antes de apagar la computadora. Guarda lo que quieras preservar y borra lo que ya no necesitas. Haya pasado lo que haya pasado, felicítate por este día de aprendizajes, sabiendo que mañana amanecerás más fuerte y con mayor sabiduría.